martes, 26 de abril de 2011
lunes, 25 de abril de 2011
MEJORANDO EL TRABAJO CON LA TECNICA # 18
El riesgo es la probabilidad de que una amenaza se convierta en un desastre. La vulnerabilidad o las amenazas, por separado, no representan un peligro. Pero si se juntan, se convierten en un riesgo, o sea, en la probabilidad de que ocurra un desastre.
Sin embargo los riesgos pueden reducirse o manejarse. Si somos cuidadosos en nuestra relación con el ambiente, y si estamos conscientes de nuestras debilidades y vulnerabilidades frente a las amenazas existentes, podemos tomar medidas para asegurarnos de que las amenazas no se conviertan en desastres.
Esta definición la saque de internet y estoy de acuerdo con la mitad.
Para mí un riesgo es tomar una acción en donde yo no tenga el control de la situación, donde no maneje las variables involucradas, en ir hacia una ir hacia una dirección en donde obtuve un resultado negativo, en donde rompa con la comodidad de donde estoy por algo completamente desconocido, donde me deje guiar por lo que siento e intuyo.
Según esta definición vivo completamente al filo de las experiencias y bajo la gracia divina, a la cual agradezco finalmente.
Bueno, la perspectiva que quiero dar de riesgo es la actitud que tomamos ante las circunstancias basadas más que en la identificación de variables o hacer gestiones de riesgos por la actitud positiva ante las circunstancias y darme la oportunidad de reemplazar las ideas que tenga sobre algo a partir de experimentar con otra consciencia.
Suena bonito, agradable y utópico, lo reconozco.
La verdad es que nuestras creencias son fundamentales en las circunstancias que vivimos lo creamos o no. Sustentan esquemas que heredamos y otros los arrastramos inevitablemente hacia el futuro para luego decir, sabía que esto ocurriría. Vaya qué casualidad.
“El desarrollo del potencial del individuo está en su poder para crear sus circunstancias cuando logra darse cuenta de cómo él influye en ellas a través de una cadena de eventos que están entrelazados entre ellos y vinculados y enmarcados dentro de un contexto ambiental y de múltiples relaciones simbióticas independientemente de los roces en las interacciones.”
Lo escrito anteriormente corresponde a una información bajada desde la consciencia por lo tanto es una verdad que en cualquier momento a partir de ahora los seres humanos en su conjunto empezarán a manifestar.
Qué tengo qué hacer para que esto me ocurra a mí.
De qué depende en mí.
Si es verdad por qué aún no me ocurre.
Creo que son cuestionamientos que todos debemos hacernos.
jueves, 14 de abril de 2011
COMO MEJORAR EL TRABAJO CON LA TECNICA # 17
La técnica de auto sanación consciente es una metodología que nace como consecuencia de mi trabajo con el péndulo a lo largo de diez años. Consiste en una serie de gráficos en donde se identifica la información usando un péndulo que se mueve por respuesta ideomotora (subconsciente) y la conexión espiritual. El objetivo es poder identificar en uno cuáles son los factores, razones, causas, orígenes, consecuencias, aspectos, experiencias, cuándo ocurrieron, en dónde, quienes estaban, quién fui yo si fue en otra vida, por qué, que parte de mi cuerpo o mi sistema energético está involucrado, como respondo según mis arquetipos internos, que competencias necesita desarrollar o qué ayuda debo buscar. Todo el proceso está formulado para la búsqueda de respuesta.
Las respuestas están en uno, sólo se necesita un medio para poder conectarlas.
Una forma en que podemos conocernos es hacernos preguntas, preguntas simples que nos lleven a saber quiénes somos.
Uno de los métodos que uso en el trabajo en consulta es llevar a la persona a cuestionar sus creencias y observar sus experiencias. Esto permite ampliar la perspectiva sobre uno mismo y darle una mayor visión de los conceptos e imágenes que ha tenido de sí.
Se puede emplear la técnica para saber exactamente las respuestas o simplemente se hace uno las preguntas y contesta de acuerdo a lo que cada quien cree.
Las conclusiones salen solas
1. Cuáles son las cualidades de mamá, papá, hermanos, familia materna, familia paterna. Aquí tomamos en cuenta aspectos positivos y negativos.
2. Cuál fue mi expectativa en el pasado en estas áreas: profesional, laboral, económico, familiar, pareja, amistad, hijos u otra que tenga.
3. Qué obtuve en cada una de esas áreas con respecto a lo esperado
4. Cómo me sentí amado(a) por cada persona que ha sido importante en mi vida. Defino para cada persona.
5. En qué situaciones las personas me ofendieron, lastimaron, me perjudicaron y qué responsabilidad tuve en ello. Define para cada persona.
6. Que he aprendido de estas situaciones
7. Cómo manejo la autoridad. Cómo puedo retomarla adecuadamente.
8. Qué creo de mi
9. Qué creen los demás de mi
10. Cómo me defino físicamente
11. Cómo me siento con lo que está a mi alrededor.
12. Qué proyectos tengo
13. Cuál es el estatus de mi situación actual. Definir de acuerdo a cada área.
14. Cómo me desempeño en las distintas áreas
15. Qué busco en este momento
miércoles, 6 de abril de 2011
MEJORANDO EL TRABAJO CON LA TECNICA#16
PROGRAMAS MAESTROS
La existencia no es una simple realidad, sino una continuidad de varios estratos compenetrados del ser desde lo denso del cuerpo físico a través de las capas de la mente, hasta el espíritu.
En nuestro estado de ignorancia, nos identificamos con nuestro cuerpo y nuestra mente inferior. Nos sentimos a nosotros mismos como diferentes y separados del mundo y de nuestros semejantes, levantando barreras sociales para demarcar nuestro sentido de separación física.
En realidad sólo nuestros cuerpos y mentes concientes y subconscientes son diferentes, en el nivel de la mente superconciente y en el ser infinito somos uno.
Los programas maestros son patrones de conducta que se forman a partir de que una persona vive una experiencia. La percepción que tiene la persona de la experiencia, establece y condiciona la forma como ella la experimenta creando posteriormente el patrón el cual se va a reforzar con las continuas experiencias posteriores.
Los patrones se traen de otras vidas. Al morir, la información contenida en la memoria subconsciente pasa a unos archivos llamados de alma, y al nacer vuelven a implantarse en la persona.
Esto permite que el alma tenga una continuidad en los temas y retos que están en su estructura de alma o plan divino.
La persona que nace, viene con las condiciones que le permiten desarrollar su personalidad y enfrentar sus temas y retos
Esto hace que las experiencias no tengan una calificación de buenas o malas, son parte de los retos que el alma eligió experimentar.
La calificación se efectúa en el momento en que la persona que la experimenta la percibe.
Si su reacción es positiva, la experiencia será un aprendizaje, si es negativa, la experiencia generará energía discordante que a su vez condicionará las próximas experiencias para esa persona.
La única forma de eliminar la energía reactiva que se genera al vivir una experiencia es volviéndola a experimentar, es por ello que se necesitan muchas vidas para sanar las experiencias vividas.
El alma invierte gran parte de su energía en sanar ese karma, limitando su crecimiento y evolución.
A su vez esa experiencia establece otros programas que paulatinamente se irán reforzando con las experiencias.
Sanar implica eliminar la energía reactiva que sustenta esos programas limitantes.
Cada vez que se presenta la experiencia, la reacción se repite y se exacerba, creando más dificultad para superarla, pero no haciéndolo imposible de superarla.
El alma, la mente, el cuerpo, empiezan a generar diversos mecanismos de defensa para evadir la responsabilidad emocional, mental, física y espiritual para enfrentar el reto.
En el trabajo terapéutico, se detecta que unos de los problemas básicos del ser humano es la separación del amor.
La separación del amor se hace para no experimentar ninguna forma de dolor. El dolor puede ser físico, emocional, mental o espiritual.
Sanar implica enfrentar las emociones, pensamientos, acciones y asumir conciencia sobre ellas.
En muchas ocasiones, se confunde sanar con cambiar y no es una regla, aunque cuando se sana, se cambia.
Sanar es aceptar no sólo las responsabilidades que se tiene como individuo en todo el contexto donde él se expresa, sino asumir la realidad de lo que él es.
Sanar es asumir un compromiso, en el momento en que se empiezan a salir los patrones que nos mantienen atados a nuestras experiencias, estos se manifiestan a través de nuestras circunstancias en todos los aspectos.
A medida que aclaramos cada capa de bloques de nuestro cuerpo emocional, el cuerpo físico libera entonces su equivalente de esa capa. A esto le llamamos el proceso de Compensación Emocional.
La persona puede experimentar un dolor generalizado, fatiga persistente, dolores de cabeza, dolores musculares y de articulaciones, cuello y hombros rígidos, aumento de peso rápido, pérdida de memoria,dificultad para dormir y para concentrarse (sensación de bruma en la cabeza), garganta irritada, vista borrosa, colon y vejiga irritables, baja temperatura y depresión.
ver protocolo
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